miércoles, 24 de julio de 2013

Francisca Zúñiga

Al finalizar la cátedra de Ética Profesional, veo cumplidos mis objetivos propuestos al principio, ya que no sólo aprendí lo visto en clases, sino que también logre ponerlo en práctica ante distintas situaciones cotidianas y siempre relacionándolo con nuestro rol fonoaudiológico. Me di cuenta lo importante que es nuestra labor, de que no es llegar y tratar con las personas, existe una serie de parámetros y tratos que únicamente con una buena base académica y nuestra experiencia, iremos complementando día a día para lograr un completo desarrollo profesional y la toma de decisiones correctas ante las situaciones a las que me vea enfrentada en un futuro. Las experiencias contadas por las docentes también resultaron muy útiles, ya que son vivencias que a ellas también las han hecho crecer como profesional, y nos muestra un futuro mundo al que nos enfrentaremos. Le tomé el peso a todo lo que involucra ser un profesional de la salud y tratar con seres humanos. Sin duda es un ramo fundamental, ya que nos hace cuestionarnos si de verdad nos sentimos preparados para en un futuro vivir situaciones tan diversas, y si podremos reaccionar de la manera correcta, teniendo una ética profesional ante cada momento y persona. Representa un paso más en nuestra formación, el trato humano y las consideraciones que se deben tener.

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